Química e historia. Como murió Napoleon

Napoleon Bonaparte


Después de su derrota en Waterloo, en 1815, Napoleón se exilió en Santa Elena, una pequeña isla del Océano Atlántico, donde pasó los últimos seis años de su vida. En la década de los sesenta, se analizaron muestras del cabello de Napoleón, y se encontró que tenían un alto nivel de arsénico, lo que sugería que posiblemente hubiese muerto envenenado.


Los principales sospechosos eran el gobernador de Santa Elena, con quién Napoleón no se llevaba muy bien, y la familia real francesa que quería evitar su regreso a Francia.

El arsénico elemental no es peligroso. 

El veneno comúnmente utilizado es en realidad óxido de arsénico. Un compuesto blanco que se disuelve en agua, no tiene sabor y es difícil de detectar si se administra por largo tiempo. Alguna vez, a este se le conoció como “el polvo de la herencia” porque podía añadirse al vino del abuelo para apresurar su muerte; así el nieto podía heredar los bienes.

En 1832, el químico inglés James Marsh desarrolló un procedimiento para detectar arsénico. En esta prueba, que ahora lleva el nombre de Marsh, se combina el hidrógeno formado por la reacción entre zinc y ácido sulfhídrico con una muestra del supuesto veneno. Si hay óxido de arsénico presente, reacciona con el hidrógeno y forma arsina, un gas tóxico. Cuando la arsina gaseosa se calienta, se descompone y forma arsénico, que se reconoce por su brillo metálico. La prueba de Marsh es un medio de disuación efectivo para evitar los homicidios con óxido de arsénico, pero se inventó demasiado tarde para ayudar a Napoleón si es que, en efecto, hubiera sido víctima de envenenamiento intencional con arsénico.

En los inicios de la década de los noventa, surgieron dudas acerca de la teoría de conspiración en la muerte de Napoleón debido a que se encontró una muestra de papel tapiz de su estudio que contenía arsenato de cobre, un pigmento verde que se usaba comúnmente en la época de Napoleón. Se ha sugerido que el clima húmedo de Santa Elena promovió el crecimiento de moho en el papel tapiz. Para librarse del arsénico. El moho pudo haberlo convertido en trimetilarsina, un compuesto volátil y muy venenoso. La exposición prolongada a estos vapores pudo haber deteriorado la salud de Napoleón, lo que explicaría la presencia de arsénico en su cuerpo, aunque no haya sido la causa principal de su muerte. Esta interesante teoría se apoya en el hecho de que los invitados asiduos de Napoleón sufrían trastornos gastrointestinales y otros síntomas de envenenamiento con arsénico, pero su salud mejoraba cuando pasaban muchas horas trabajando en el jardín, el principal pasatiempo de la isla.

Posiblemente nunca se sabrá si Napoleón murió por envenenamiento intencional o accidental con arsénico, pero este ejercicio de detectives de la historia aporta un ejemplo fascinante del uso del análisis químico. Este no sólo se utilizaba en la ciencia forense, sino también tiene una función esencial en el intento de abarcar desde la investigación pura hasta las aplicaciones prácticas, como el control de calidad de productos comerciales y el diagnóstico clínico.

07/10/2014

Descubrirlaquimica. Estudiante de química en la USC


Este artículo participa en la XL edición del carnaval de la química alojado en el blog "Ciencia explicada".

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